Rebeca Escribens tuvo que pasar momentos difíciles tras llegar la pandemia a nuestro país. Su padre vive en un tercer piso y su mayor preocupación era cómo cuidarlo sin exponerlo, teniendo en cuenta que ella trabaja en su de televisión y tiene que exponerse en la calle.
«Cuando empezó la pandemia, recuerdo que no podía visitar a mi papá, y eso me ponía muy triste y me hacía sentir frustrada. Pero luego me calmé y me dije: Rebeca, tienes que calmarte y empezar a resolver las cosas. Así que junto a mis hermanos armamos un plan y nos organizamos bien, para alcanzarle diariamente la comida a mi papá», recordó la animadora.
«Como él vive en el tercer piso, habilitamos una canasta con una cuerda y allí le poníamos los alimentos y nos asegurábamos que no le falte nada y a la vez lo manteníamos protegido«, agregó Rebeca Escribens en la Plataforma para mujeres ‘Compartiendo Sabiduría’ de Tottus.
Rebeca Escribens tuvo que acostubrarse a una nueva rutina
La actriz señala que fue difícil adaptarse a la nueva rutina, sin embargo, sabe que todo era por el bien de su progenitor.
«Todas podemos sentirnos tristes, molestas o desmotivadas y esto es totalmente válido, lo que no podemos permitir es quedarnos en ese estado de ánimo. Debemos tener en cuenta que los momentos complicados van a pasar y cuando eso suceda nos vamos a sentirnos muchísimo mejor con nosotras mismas y más fortalecidas. A esto, la clave es aprender a reconocer nuestros sentimientos, sobre todo aceptarlos», señaló.